Entre tus propósitos de año nuevo, ¿Se encontraba el de ponerte en forma? ¿Apuntarte al gimnasio? Éstos son de los propósitos más comunes, y a la vez, los que más rápido se abandonan, porque, habitualmente, nos aburrimos rápido de las dietas y en el gimnasio no sabemos bien qué hacer, nos aburrimos, lo posponemos y finalmente lo dejamos.
Pero hay una solución, sobre todo si eres principiante y no tienes muy claro cómo entrenar, o si llevas tiempo sin practicar deporte, que puede solucionar estos problemas de un plumazo: Recurrir a un Entrenador Personal (o Personal Trainer). La idea al principio puede parecer rara: ¿Contratar a una persona para que te entrene, si no eres deportista profesional? CLARO QUE SÍ.
Además te doy 5 motivos por los que vale la pena hacerlo:
Motivación
Un entrenador personal se preocupará de que consigas tus objetivos,y además siempre estará detrás de ti animándote a conseguirlos. Cuando pienses que no puedes más, tu Personal Trainer te dará ese ánimo que te hacía falta, y cuando lo consigas te sentirás mucho mejor. La rutina que te marque y sus resultados continuarán motivándote más, y así continuamente, te proporcionará el combustible motivacional que necesitas, hasta llegar a los objetivos que te marques.
Compromiso
Con un Entrenador Personal, se acabó el procastinar y el saltarte tus actividades físicas. El Personal Trainer crea un plan adaptado a ti, pero con unos horarios que has de cumplir, y un tiempo marcado para cada actividad. Así te aseguras de que sí o sí, realizarás ejercicio y que realizarás las rutinas necesarias en su justa medida. Ni repeticiones de más, ni tiempo perdido en los descansos, pues también éstos estarán marcados. Comprometerte con lo que tu Entrenador Personal te propone, es de suma importancia para crear un hábito de ejercicios de forma saludable.
Personalización
Su mismo nombre lo indica: Entrenador PERSONAL. Normalmente en un gimnasio, los entrenadores que hay están para atender a mucha gente a la vez, tal vez proponen tablas de ejercicios estandarizadas para determinados objetivos, pero no se dedican exclusivamente a cada uno de los usuarios del local. Al contrario, un Personal Trainer te conoce: sabe en qué forma física te encuentras en cada momento, y si tienes limitaciones por alguna enfermedad o lesión, así que amoldará las actividades al tu nivel de capacidad, y te ayudará a mejorar a tu propio ritmo. Así además evitará que te lesiones, porque jamás te propondrá algo que no puedas realizar, y te enseñará la forma correcta de ejecutar cada ejercicio.
Seguimiento
Está claro que, cuando comiences un plan de entrenamiento, lo harás enfocado a conseguir un determinado objetivo. Con un seguimiento, es decir, con el control de tu peso, medidas, y estado de salud, podrás ver día a día cómo te acercas a tu objetivo. El Entrenador Personal te ayudará a lograrlo y en el transcurso de ese tiempo, estará a tu lado. Siempre estará pendiente de tu bienestar. El seguimiento es su herramienta clave para comprobar la eficacia del plan, ver si algo no funciona y cambiarlo a tiempo.
Resultados
Los Personal Trainer son profesionales que conocen muy bien su trabajo y no pararán hasta que consigas aquello que te proponías cuando comenzaste. Te proporcionan una ayuda eficaz, definitiva y aprenderás muchísimo en el proceso. Todo lo que hagas, estará optimizado para ti: no más ejercicios realizados sin ton ni son, nada que pueda hacerte daño. Las rutinas se intensificarán en medida a tus avances y todo se enfocará a que tengas, indudablemente, RESULTADOS.
Como recomendación, si quieres auténticos resultados, asegúrate de acudir a un Entrenador Personal Titulado, ya que ofrecerá más seguridad y calidad de servicios que alguien que sólo haya recibido un cursillo corto. Por tu salud y bienestar, infórmate bien antes de contratar.
Buenos motivos, ¿verdad? Pues ya lo sabes, ¡Pon un Entrenador Personal en tu Vida!
¿A qué estás esperando?