Nadie es perfecto, eso lo sabemos todos. Hay ocasiones en las que nuestras imperfecciones nos sobrepasan y nos hacen creer que «no podemos» o que no valemos como personas. ¡Y qué equivocados estamos!
Quitarse esa negativa venda de los ojos requiere de un proceso de transformación.
En este corto, os emocionaréis con la historia de alguien que pensaba que lo tenía todo en su contra.